Por Domingo Piga
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Por tercera vez nos
visita en el festival sureño de Chile: Los Temporales Teatrales;
la Compañía Teatro del Umbral. En todas las ocasiones nos
referimos a ella como el mejor conjunto visitante.
Uruguay junto a Argentina
y Chile de antes del "apagón" cultural del arte dramático causado
por las sangrientas dictaduras, formaban el tríptico esplendoroso
del teatro de toda América y todos fueron objeto de la persecución
y el encarnizado odio de la incultura: "Viva la muerte, muera
la inteligencia", el lema del franquismo.
Pero los muertos del
matarife gozan de buena salud: Montevideo, Buenos Aires y Chile
resurgieron de debajo de la tierra, en busca del tiempo perdido.
En nuestro amado Chile -aunque maltrechos- surgen de nuevo los
autores, actores y las compañías.
La Universidad de Chile,
que siempre fue la conciencia crítica del pueblo; fue perseguida.
Se intentó destruirla, minimizarla, angustiarla económicamente.
Privarla de su carácter nacional. El Teatro Experimental de la
Universidad de Chile, teatro señero de toda la Patria y de toda
América, fue diezmado, reducido a los límites de una compañía.
Así le quitaron su carácter de ser el gran movimiento renovador
y creador permanente del arte del teatro en Chile. Pero no pudieron
despojarlo de la influencia que habia ejercido en el espíritu
creador de la juventud.
EJEMPLO DE AMERICA
Este panorama penoso,
cargado de odio demoníaco, fue desapareciendo y han ido rebrotando
el verdor y el vigor de la fuerza de la inteligencia creadora
en este Cono Sur de nuestra América. En Uruguay -aunque partido-
volvió el glorioso "El Galpón" con el recuerdo del "viejo" Atahualpa
del Cioppo. En Argentina, ya libre de persecución y de censura,
ha ido resurgiendo ese robusto movimiento del pasado, ejemplo
de América. En Chile, el teatro pudo tímidamente abrir sus puertas
y ya han entrado el aire y la luz, para iluminar sus escenarios
después de años de penumbra.
"El Umbral" es una
compañía nueva. Los grandes del movimiento precedente son "El
Galpón" de Montevideo y "La Comedia Nacional" también de Montevideo.
Este movimiento nuevo está haciendo un nuevo teatro, tan importante
como los famosos antecesores. Vuelve a resurgir el gran movimiento
cultural montevideano. Nosotros tenemos tres ejemplos valiosos
a los cuales ya nos referimos - a dos de ellos- en los comentarios
de los décimo segundos y décimo tercer Temporales Teatrales.
Su primer espactáculo
fue la unión de dos hechos y personajes alejados en espacio y
tiempo: La historia medieval de los amores prohibidos del filósofo
Abelardo, fraile y Eloísa, monja, cuyo hermoso acto de amor fue
terriblemente penado por la Iglesia con la castración y unido
en el crisol teatral de Carlos Rehermann, como un maravilloso
fruto dramático de pasión y de inteligencia.
PARIS DE LOS '20
Luego "El Umbral" trajo
a Puerto Montt -París de los inicios de 1920- el mundo de la pintura
y el alcohol con el ambiente de los pintores revolucionarios buscadores
del color y la belleza pura: la pasión desbordante que destruyó
sus vidas físicas, con alcohol, tuberculosis y suicidio. Miseria
física, miseria económica, grandeza espiritual y pasión más allá
de todos los límites.
Y ahora llegó "El Umbral"
con un humor extremo, absurdo, tratando el disparate en forma
inteligente y fina. Como el absurdo de la pintura, más que disparate
goyesco, más que la estructura ionesquiana del diálogo. Tema muy
serio que se convierte en burlesco de comedia disparatada. Todo
esto exigía el acierto del golpe preciso que se consiguió con
el trabajo actoral y la dirección eximia. Con toda la extrema
seriedad que debe tratarse lo cómico.
La comicidad exige
rigor, precisión rigurosa. La medida del disparate y de lo absurdo
es extraordinariamente difícil de dar. Por esto, hay muchos dramas
y escasísinas comedias. La combinación de un autor, de un autor
inteligente y creador de un buen grupo, pero muy bueno de actores
y una directora como Sandra Massera que refleja exquista sensibilidad,
cultura amplísima, creatividad en grado sumo, son un resultado
supremo del arte del teatro. Vemos desde ya a la gran compañía
del teatro uruguayo y de Sudamérica.
* Publicado en el diario "El Llanquihue"
de Puerto Montt, el miércoles 9 de julio de 2003.
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