de Sandra Massera

UN MUNDO EXTRAÑO Y FASCINANTE

Por Egon Friedler (Semanario Hebreo)

“Hotel Blanco” de Sandra Massera  - Obra escrita en homenaje al escritor japonés Ryonosuke Akutagawa

Esta obra, ganadora del Primer Premio de dramaturgia Juan Carlos Onetti 2013, es un original homenaje al atormentado escritor japonés Ryonosuke Akutagawa, que se suicidó en 1927 a los 35 años de edad. Akutagawa, autor del célebre cuento sobre el cual se basó “Rashomon” que Akira Kurosawa inmortalizó en una  película clásica, aparece en esta evocación de Sandra Massera como un fantasma que vive en un hotel abandonado donde se reencuentra con las criaturas de ficción creadas por su imaginación. Este atrayente esquema argumental brinda a la autora un pretexto perfecto para recrear el fascinante y extraño mundo del Japón medieval de los siglos XII y XIII en el que Akutagawa situó la acción de la mayor parte de sus cuentos.
El resultado es muy sugestivo e interesante. El elenco de 13 actores actúa con una elogiable unidad de estilo, obtenida gracias al esmerado trabajo de dirección  de Fabricio Galbarini (que también interpreta a uno de los dos criados) y de la propia autora. Más allá del excelente trabajo de equipo del elenco, hay dos actores en roles protagónicos que se destacan muy especialmente: Alain Blanco, como el complejo y conflictivo Ryonosuke Akutagawa y Marcel Sawchik, como el duro y desafiante bandido Tajomaru.
Todos los detalles de la puesta han sido cuidadosamente trabajados, desde la escenografía elocuentemente decadente (Sandra Massera) al cuidadosamente diseñado vestuario ( Laura Lockart y Paula Martell) y desde la reveladora iluminación ( Alvaro Domínguez) al fantasmal maquillaje (Paula Martell y Victoria Falkin). Una variada selección musical de varios autores contemporáneos o modernos ( León Biriotti, Luigi Nono, Jaap Blonk, Giacinto Scelsi, John Cage y Thomas Ondrusek) contribuyó a subrayar el clima de alienación y de misterio en que se desarrolla la obra. 
Nunca sabremos cómo habría reaccionado Ryonosuke Akutagawa si hubiera podido ver este inesperado homenaje a su persona y su obra tan lejos del Japón.  Pero indudablemente constituye un muy original y valioso intento de acercarse a la cultura japonesa desde el muy lejano Uruguay.